Las grasas saturadas (ácidos grasos saturados) más importantes en la nutrición humana son el láurico, mirístico, palmítico y esteárico.
El aceite de palma es una fuente de energía necesaria para el cuerpo que posee un balance en la proporción de ácidos grasos saturados e insaturados, con aproximadamente 44% ácido palmítico, 5% ácido esteárico (ambos saturados), 40% ácido oleico (mono insaturado), 10% ácido linoleico y 0.4% ácido linolénico (ambos poliinsaturados) (Ong 1994).Las grasas saturadas son sólidas a temperatura ambiente. El ser humano y otros organismos de sangre caliente almacenan la grasa en forma de ácido graso palmítico predominantemente y esteárico.